Inicio » Catálogo » El Confital: ningún pájaro vuela donde el aire no existe. Il Confital: nessun uccello vola dove l'aria non esiste
Comienzo un viaje hacia el interior de una tarde cualquiera, una de esas tardes de escritura en las que se adivinan sucesos inminentes.
Mientras paseo entre piedras y aulagas, una señal invisible y familiar comienza a girar sobre mi cabeza. A ratos se deshace en torbellinos, en cilindros de arena.
Los marineros del litoral me comentan que hace muchos años experimentaron un sobresalto parecido, aunque nadie se atrevió entonces a dar una explicación razonable a tan extraño fenómeno.
Me encuentro instalado en una isla que habita otra isla, muy cerca de la ciudad donde vivo habitualmente. Visito esta montaña muy a menudo porque aquí me siento libre y se respira una tranquilidad única.
Esa gaviota no para de dar vueltas. Me mira fijamente, como si tanteara lo que pienso. El pájaro remonta el vuelo y vuelve a mirar. Esta vez a mi atónita cara de mero que también lo mira.
Comincio un viaggio all’interno di un pomeriggio qualsiasi, uno di quei pomeriggi di scrittura in cui si prevedono fatti imminenti.
Mentre passeggio tra pietre e ginestre spinose, un segno invisibile e familiare inizia a ruotare sulla mia testa. A tratti si disperde in vortici, in cilindri di sabbia.
I marinai del litorale mi riferiscono che molti anni fa provarono un simile sobbalzo anche se, allora, nessuno osò dare una spiegazione ragionevole a un fenomeno così strano.
Mi trovo insediato in un'isola che abita un'altra isola, molto vicino alla città dove vivo abitualmente. Visito questa montagna molto spesso, perché qui mi sento libero e si respira una tranquillità unica. Quel gabbiano non smette di gironzolare. Continua a fissarmi come se tastasse quello che penso. L'uccello riprende il volo e mi guarda ancora.