Inicio » Catálogo » Mi diccionario poético
Esta obra es un material original que muestra, de una manera sencilla, diferentes formas de aprender a través de la lectura y el juego. Es capaz de entrelazar contenidos propios de nuestro currículo educativo con la estética más detallista de un poeta.
Las maestras/os que trabajan con niñas/os de entre seis y diez años, pueden emplear este valioso instrumento como complemento a los aprendizajes de lectura. Proporcionándoles de manera natural, diferentes habilidades lingüísticas necesarias para fortalecer el aprendizaje de las letras, aumentar el vocabulario, reconocer diferentes formas de expresión como la poesía o las adivinanzas…
Para los más pequeños, puede llegar a ser un método de motivación previa al aprendizaje de muchas letras de nuestro abecedario. Así como un mecanismo que el maestro puede emplear para corregir multitud de dificultades que de manera prematura van apareciendo a lo largo de las primeras etapas educativas.
Para los más grandes, adentrarse en el mundo de la poesía genera en los niños una nueva manera de enfrentarse a la lectura. Reforzando de igual modo, todos aquellos aspectos propios de la expresión oral y escrita que en los primeros cursos de la etapa de primaria se van trabajando.
A lo largo del libro, nos encontramos con todo un compendio de temas que giran en torno a elementos propios de nuestro contexto más inmediato, un vocabulario cercano a los niños que les puede llegar a entusiasmar, principalmente si el maestro es capaz de buscar a través de los mismos una conexión directa con las áreas de trabajo.
En este sentido, poemas como el dedicado a la letra “W”, en donde el autor hace referencia a un deporte practicado en nuestras islas, muchos de los niños pueden verse identificados con el mismo.
De igual modo, si hacemos referencia a la letra “K”, se da paso a reconocer el kilómetro como unidad de medida, contenido del área de Matemáticas que puede trabajarse de manera indirecta mediante la explicación de este poema.
Todas y cada una de las poesías y adivinanzas muestran la posibilidad de trabajar contenidos diversos con nuestros alumnos, potenciado así el aumento de vocabulario y la curiosidad por aprender nuevos aspectos de nuestra naturaleza, de nuestra tierra,… Y es, en este sentido, donde podemos destacar poemas como el dedicado a la “I”, en la que se mencionan aspectos del área de Conocimiento del Medio (mar, isleño, islas Canarias, Atlántico, archipiélago…)
Sin duda, podríamos desgranar multitud de aspectos positivos y educativos que nos ayudarían a complementar nuestro material de trabajo en las aulas. Pero no hay que olvidar ese papel tan importante que juegan los padres, abuelos y tíos de todos los niños que comienzan con su formación. Todos ellos, forman parte de nuestro sistema educativo, por lo que también, deben ser capaces de compartir con los más pequeños esta obra que, por su sencillez y su acertada elaboración, da lugar a la creación de un clima de lectura, que da paso a la imaginación y a la creación de nuevos escritos por parte de los lectores.
Es un libro para los maestros, las familias y los niños. De todo aquel que muestre un pequeño interés por el mundo de la lectura, la poesía. Algo que nos entretiene y nos forma, que nos hace ampliar nuestra visión del mundo, compartir conocimientos con los demás, ser más consientes de lo que ocurre a nuestro alrededor, capaces de adentrarnos en un mundo de fantasía que nos permita ser, en definitiva, más felices. Pues leer nos proporciona esa felicidad momentánea que todos en algún momento de nuestras vidas necesitamos encontrar.